Los esqueletos de dinosaurios en patos encontrados hace más de 100 años están tan bien conservados que contienen partes carnosas de las especies desaparecidas incorporadas en finas capas de arcilla, dicen los científicos.
A principios del siglo XX se descubrieron en el este de Wyoming especímenes de edmontosaurus annectens, conocidos por su cráneo largo, similar al del pato grande. Un reciente reexamen de esos fósiles realizado por paleontólogos de la Universidad de Chicago reveló que los fósiles no son sólo huesos, sino partes del cuerpo de la momia protegidas bajo una máscara de arcilla, según un artículo publicado la semana pasada en Ciencia.
Renderice una fotografía de archivo de edmontosaurus annectens.
Román García Mora/Stocktrek Image/Getty Images
Los huesos incluyen trozos de piel, púas y “impresionantes y deslumbrantes”, dijeron los investigadores.
La carne fosilizada no son partes “carnosas”, sino delicados moldes de arcilla formados por microbios a medida que los animales se descomponen, según el artículo.
Las capas uniformes de arcilla están unidas por arenisca, en lugar de tejido blando fosilizado real, probablemente formado como una plantilla superficial sobre el cadáver en descomposición, con la ayuda de biofilas.
Esto contrasta con la conservación típica de los tejidos blandos, que ocurre en ambientes menores, que carecen de oxígeno, como lagunas o fondos marinos, y conduce a la fosilización de partes delicadas como plumas y piel, dijeron los investigadores.

La pezuña, que se mantiene cortada como una finísima capa de arcilla, recubre el frente de las pisadas al pie de mami llenas de crecimiento del dinosaurio edmontosaurus annectens, lleno de dietas.
Tyler Keillor/laboratorio de fósiles
Cuando se descubrieron los especímenes por primera vez. En los sedimentos de río gruesos y oxigenados, los científicos supusieron que contenían textura de piel y partes del cuerpo fosilizadas. Pero un examen más detenido de los esqueletos originales, así como los hallazgos de otros dos, murmuró E. Annectens, un joven y un adulto, lo demostraron.
El joven E. Annectens es el primer dinosaurio mami subcutáneo y el primer dinosaurio de cuerpo grande con “contorno carnal completamente conservado”, incluido el cuello y la cresta posterior.
El espécimen completamente deprimido es el primer hadrosáurido que mantiene la fila completa de púas de la cola. Este es también el primer tetrápodo con pezuñas conocido, lo que marca el primer reptil con pezuñas, según el artículo.

Una joven madre dinosaurio facturada por patos Edmontosaurus annectens se conservó como un cadáver seco apoyado sobre sus costillas hace unos 66 millones de años.
Tyler Keillor/laboratorio de fósiles
La cresta de la línea media y la cola se desprenden de E. Annectens Según los investigadores, se ha sugerido que la divulgación es “una piel mucho más compleja” que las restauraciones históricas.
La especie también tiene similitudes funcionales y morfológicas con algunos escamados modernos, el orden más grande de reptiles que contiene lagartos y serpientes.

















