NOIDA, India — Sujata Bisht es la orgullosa “abuela” de más de 40 perros en la ciudad, que se encuentra justo al sureste de Nueva Delhi.
De vez en cuando, reúne a su equipo (compañeros “mamás” y “papás” que cuidan cada uno de unos cinco perros en sus respectivas calles) para vacunar a cada uno de ellos contra la rabia.
“Para mí son como niños”, dijo Bisht, de 55 años.
En la capital de la India y sus alrededores, los perros callejeros son tan omnipresentes como las personas.
Se les conoce como “indies” o perros nativos de la India, una raza mestiza reconocida por ser resistente e inteligente. Sin embargo, gestionar su elevado número se ha convertido en una prueba de gobernanza y compasión en megaciudades cada vez más densas como Delhi, con una población de más de 33 millones.
En agosto, la Corte Suprema de la India ordenó que todos los perros callejeros en la Región Capital de Delhi, que incluye a Noida, fueran reubicados permanentemente en refugios después de su esterilización, citando mordeduras de perro y rabia. La decisión provocó una reacción inmediata, con enfrentamientos entre la policía y los manifestantes y mensajes de solidaridad de celebridades.

















