El arrebato de “enojado” de Mike McDaniel en la banca lo dijo todo. Sus Dolphins no van a ninguna parte esta temporada más que a la baja.
Miami fue derrotado en casa por los Ravens el jueves por la noche, 28-6, y cayeron a 2-7 en la temporada, quedando fuera del alcance de los playoffs.
Los Dolphins, perdiendo 7-3, tuvieron la oportunidad de tomar la delantera al principio del juego cuando decidieron intentarlo en una situación de cuarta y 1 desde la yarda 12 de los Ravens.
El tackle Larry Broom, sin embargo, fue sancionado por una salida en falso para hacer retroceder a Miami cinco yardas.
En un momento de pura frustración, McDaniel se quitó los auriculares y comenzó a gritarles a sus compañeros de equipo. Momentos después, las cosas fueron de mal en peor cuando el pateador Riley Patterson falló un gol de campo de 35 yardas. Baltimore avanzó por el campo en una serie de siete jugadas para abrir una ventaja de 14-3.
Cuervos el 30 de octubre de 2025. Imágenes falsas
McDaniel explicó después del partido por qué estaba enojado.
“Estamos poniendo mucho énfasis en todo lo relacionado con nuestra operación”, explicó McDaniel. “Y en un cuarto y 1 crucial, estábamos muy entusiasmados con el aspecto defensivo, por eso convocamos la jugada. Esa es una regulación absoluta, sabemos que eso evitará que ganes. Simplemente estoy enojado por nuestra lesión autoinfligida”.
Hubo muchas lesiones autoinfligidas por parte de los Dolphins, ya que perdieron el balón tres veces: dos balones sueltos y una intercepción de Tua Tagovailoa. Tuvo cinco penalizaciones para 45 yardas, lo que afectó aún más sus posibilidades.

Con los Dolphins a solo un juego de ventaja sobre los Jets con una victoria en la AFC Este y la fecha límite de cambios a solo unos días de distancia, será interesante ver qué sucede la próxima semana para Miami.
 
